Esta lacra no nos abandona por mucho que traten algunos de camuflarla. Son muchos, decenas los incidentes que se suceden cada fin de semana en la lineas de cercanias que unen Cádiz con las poblaciones colindantes. La franja horaria entre las 6 y la 9 de la mañana es un verdadero infierno. La lineas que se llevan la peor parte, son las que unen la capital con San Fernando y con Puerto Real.
Las zonas de ocio de Cádiz atraen a una numerosa cantidad e jovenes que vienen a disfrutar con la convicción y la confianza que el transporte público les devolvera sanos y salvos a sus casas. Los padres de estos jovenes, ajenos al problema, descansan tranquilos en sus casas, confiados en que sus hijos no tienen necesidad de conducir despues de haber tomado alguna copa o simplemente despues de estar toda la noche bailando y disfrutando de lo propio de su edad.
Pero la realidad es otra, la pesadilla para los conductores comienza el dia antes o incluso la semana antes cuando comprueban el turno que les toca para el fin de semana. San Fernando a la 6 uff, Puerto Real a las 6,30 vaya tela. La primera parada suele estar controlada por vigilantes que ejercen una labor no solo de vigilancia sino de garantia para el conductor al organizar las colas e impedir el acceso a quienes presentes evidentes sintomas de riesgo para todos.
Pero resulta que una vez que salimos de la primera parada, "que Dios se apiade de nosotros", a partir de ahí la pesadilla comienza a tomar forma real. Las sucesivas paradas van acelerando las pulsaciones de los conductores hasta que llegan a la definitiva, la de la Antigua telegrafia, ahi se concentran cientos de jovenes que acaban de salir de las discotecas y de la playa, ansiosos por regresar y ansiosos de continuar la juerga.
Bebidos, fumados, drogados, eso no lo sabemos solo adivinamos su estado en sus rostros evadidos y en su lenguaje inconexo, muchos pagan se limitan a sentarse y esperar, otros fuera de si intentan hacerse notar y provocan al conductor como si fuese un acto de heroismo ante su grupo. Los insultos y vejaciones no las vamos a publicar, si alguien quiere puede venir cualquier fin de semana y por un euro setenta sale de dudas y enriquece su lexico.
Otras veces,cada vez más habitual, la situacion se sale de madre y como este pasado fin de semana se necesita la presencia de la Policia y de una ambulancia para atender al conductor que no pudo soportar la tensión, los insultos, las amenazas y la pasividad del resto de usuarios .
Mañana los delegados de Salud de las empresas Tranvias y Comes, se van a reunir para tratar nuevamente el asunto y solicitar tanto a la Inspección de Trabajo como a la Subdelegación de Gobierno que pongan de una vez por todas solucion a este gravísimo problema.
El Chófer de El coche de la Hora, espera que se tomen medidas para que estos incidente no se repitan y que su responsables no se vayan de rositas, pero esa completamente seguro que hasta que no ocurra alguna desgracia con decenas de heridos e incluso muertos, no se va a tomar cartas en el asunto.
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