Hace tiempo me enseñaron que el café no hay que tomarlo ni muy caliente, por miedo a quemarse, ni frío, porque perdería todo el encanto de su aroma y sabor. Esta reflexión bien se podría aplicar a todo lo sucedido en la huelga general del pasado día 29 de septiembre. Si escupo todo lo que pasó por mi mente al medio día del 29 de septiembre, podría cometer el error de expeler desde lo más profundo de la impotencia toda la injusticia que en Cádiz se vivió, eso podría dar lugar posiblemente a un posterior arrepentimiento. En cambio, si dejo pasar el tiempo, todo lo sucedido podría enfriarse en la mente de los que padecimos dicha anarquía, y ese día, acabaría como casi todo lo que se enfría, en el tempano del olvido. Con el café templado pienso que dicha fecha debía recordarse en los anales de la historia del sindicalismo, para evitar que vuelva a suceder los hechos acontecidos. Eso pasa por volver a regular, modificar y pulir el Real Decreto Ley 17/1977 de 4 de marzo, que regula el derecho de huelga en el ámbito de las relaciones laborales.
La Huelga General del 29 de septiembre tuvo un fracaso absoluto. Prestigiosos columnistas y periodistas de prensa de primera línea, así lo confirmaron en el transcurso y siguientes días. Los sindicatos convocantes no pueden bajo ningún concepto meter en el saco de los porcentajes a todos aquellos trabajadores que se han visto obligados a secundar la Huelga General con medidas coactivas, vandálicas y terroristas. El citado Real Decreto Ley 17/1977 de 4 de marzo, concretamente en el artículo 6º, apartado 4º dice “que se respetará la libertad de trabajo de aquellos trabajadores que no quisieran sumarse a la huelga”.
Dicho esto, quisiera felicitar a los administradores del blog “El coche de la hora”, por la rapidez con la que eliminaron unos artículos con firmas de seudónimos. Debemos de evitar necesariamente los insultos, las expresiones malintencionadas, descalificaciones, etc., porque caeremos en el error de los administradores de la mayoría de los blogs que circulan por Internet, donde todos estos adjetivos tenían un hueco, y en la mayoría de los casos, con un anónimo como responsable. Enhorabuena.
De todas formas, me mordería la lengua si no comento que aquel que firma con el pseudónimo “El mirón de la Mirilla”, realizó un escrito futurista, porque según pude leer en el texto, se vaticinaba lo que iba a pasar, y en poco se equivocó (excluyo nuevamente toda descalificación hacia cualquier trabajador). Si nos ceñimos en el respeto a la libertad de trabajo de aquellos trabajadores que no quieran secundar la huelga según se indica en el citado Real Decreto Ley 17/1977 (que es la misma que regula el derecho a ejercerla), todo trabajador que en aquel momento se encontraba en la puerta de los garajes, tendrían que haber entrado hacia el interior de las instalaciones, y el máximo responsable de la empresa en los garajes en ese momento, debía de haberlo permitido (las fuerzas del orden y seguridad estaban presente). Mención aparte merecen los máximos responsables de las secciones sindicales de los sindicatos convocantes que allí se encontraban, con una actitud de pasotismo y permisibilidad mostrados en todo momento, permitiendo todo lo que allí se cocía en contra de la voluntad de sus compañeros. Igualmente, me parece poco ético (es un criterio muy personal), que delegados de personal perteneciente a los sindicatos convocantes de cualquier empresa, adoptasen la postura de no secundar la huelga, y menos ético aún, que los máximos responsables de las dos secciones sindicales practicasen el “no veo, no hablo y no escucho” ante dicha contrariedad.
También es bueno recordar que la mayoría de trabajadores del centro de Cádiz, tiene establecido el disfrute de sus vacaciones en un cuadrante expuesto en los tablones informativos de la empresa desde finales del pasado año, aunque en escasas ocasiones, dicho disfrute suele asignarse a criterio del interesado, principalmente para buscar intereses personales como el cuadrar las vacaciones con la de su pareja, hacerla coincidir con una intervención quirúrgica sin que le ocasione coste económico en las pagas venideras, evitar la pérdida económica en los días de huelga, etc. El pasado día 29 de septiembre, desde primeras horas de la mañana, estuve en contacto telefónico con los delegados del S.A.C., y algún que otros compañeros a los que se le aplican las rotaciones para los descansos semanales (qué importante serían las rotaciones en los servicios y descansos semanales, cuantas suspicacias entre los trabajadores se evitarían), todos coincidían en las malas artes que los representantes de los sindicatos convocantes habían practicado. La coacción y el vandalismo no se pueden practicar para la consecución de un fin en un país con los apellidos “Democrático y de Derecho”. Solo espero que para las próximas elecciones todos brindemos con café templado y decidamos en las urnas a qué tipo de sindicatos no debemos elegir. Y por supuesto, que no se enfrié el café.
Jesús Jurado Pinto
Este artículo ha sido remitido al correo elcochedelahora@gmail.com, por nuestro compañero Jesús del centro de trabajo de Cádiz, que además es Delegado de Personal del SAC y Secretario del Comité.
El Chofer de el Coche de la Hora, agradece está colaboración y anima a todos a hacer algo parecido con vuestras ideas y opiniones y si es posible acompañarlas de alguna foto para que este sea el blog de todos.
Saludos revolucionarios.
